[Análisis] Fire Emblem Engage

Título: Fire Emblem Engage                                  Plataforma: Nintendo Switch

Género: Estrategia                                              Distribuidora: Nintendo

 

Meses antes de su anuncio se filtraron imágenes de un supuesto nuevo título (el decimoséptimo para ser más exactos) de una de las franquicias clásicas de la desarrolladora nipona con más de 30 años a sus espaldas pero no fue hasta el Nintendo Direct de Septiembre del pasado año que no pudimos ver el anuncio oficial de un título que vería luz a escasos meses de su anuncio: Fire Emblem Engage.

Pese a ser una franquicia algo desconocida en occidente (y a la vista está en las escasas ventas de títulos lanzados en generaciones pasadas que son una auténtica pieza de cualquier coleccionista que se precie por la escasez de unidades distribuidas y vendidas) se pudo apreciar con el lanzamiento para 3DS  de Fire Emblem Awakening un repunte considerable en ventas, consiguiendo llegar a un mayor publico gracias también sin duda a la incorporación de un mayor número de sus personajes en otros títulos como Super Smash Bros for Wii U/3DS.

Con dos títulos de la saga "Warriors" y junto a Three Houses, Fire Emblem Engage llega como segundo título de peso de la franquicia a Nintendo Switch, con un sinfín de cambios (especialmente en su apartado técnico y artístico) y jugando con las emociones de los fans más longevos y fieles de la saga regalándonos un título sobresaliente cargado de dosis extremas de fan service.

 

 

HISTORIA

Hace mil años hubo una cruenta guerra entre los diferentes reinos de la isla de Elyos y el Dragon Caído llamado Sombron, donde, haciendo uso de un misterioso poder que conseguía invocar a Héroes de tiempos pasados y otros mundos, consiguieron sellar al mal, no sin antes caer herido gravemente el héroe que consiguió derrotar a Sombron: Alear.

Sumido en un sueño de 1000 años, el protagonista principal de esta nueva entrega, despierta de su letargo coincidiendo con la extraña aparición de enemigos caídos en el pasado que han vuelto a la vida bajo la sombra de un poder maléfico que augura la vuelta del Dragon Caído una vez más conocidas como Aberraciones.

Alear, pese a su despertar, no recuerda nada de lo ocurrido hace mil años y todo le es desconocido para el hasta que descubre el anillo que porta en su dedo. Su madre, la cual ha esperado un largo tiempo al regreso de su hijo le cuenta lo ocurrido en la pasada guerra: Los diferentes reinos consiguieron crear doce anillos en cuyo interior residía el alma de grandes guerreros de otros mundos. Dichos anillos se encuentran dispersos por los diferentes reinos que conforman la isla de Elysium y aquel que consiga hacerse con los doce obtendrá un poder inimaginable.

Tras esto, Alear recuerda que dicho anillo porta el espíritu del que antaño fue su compañero de batallas y que, los fans de la saga Fire Emblem conoceremos desde su primera aparición: Marth.

Al poco de su despertar el castillo de los Dragones Divinos sufre un terrible asedio, descubriendo que tras el existe un misterioso encapuchado que ha ido en la busca de los pocos anillos y sus Emblemas que allí se custodian. Tras un fatídico enfrentamiento, Alear jura recuperar todos los anillos escondidos en los diferentes reinos y acabar con la amenaza que se cierne sobre ellos.

Sin entrar mucho en spoilers, esta es básicamente la trama inicial que desencadena los diferentes eventos que iremos descubriendo en el juego, encontrándonos en nuestro periplo un sinfín de personajes (con algunos diseños más acertados que otros) faltos de carisma u originalidad. La historia en sus inicios no se complica en exceso, siendo bastante simple y carente de no mucho interés hasta bien entradas las horas de juego. Esto es digno de destacar, puesto que cuando se habla de Fire Emblem, por lo general estamos ante un título donde la trama cuenta con un gran peso...algo que en Engage no ocurre pese al recurso de utilizar a personajes icónicos dentro de la franquicia como reclamo para los fans acérrimos de la saga.

 

GRAFICOS

Si hay algo que caracteriza a la saga Fire Emblem (especialmente en las últimas entregas) es que todos y cada uno de los títulos posee un apartado artístico y técnico sobresaliente pese a que el género del título tampoco permita ni necesite hacer muchos alardes con respecto al apartado visual. Por ellos siempre hemos podido disfrutar de cinemáticas realmente impresionantes con un estilo de anime y haciendo uso de un cellshading pulido hasta el máximo detalle. A esto, debemos sumarle un diseño de personajes protagonistas que se encuentran a la altura, haciendo que las cinemáticas y animaciones fuesen un deleite para el espectador.

En Fire Emblem Engage, Intelligent System sigue apostando por un apartado artístico inspirado en el manganime, pero a diferencia de anteriores entregas, en esta ocasión el título es (por describirlo de alguna manera) más mánga aun si cabe. Ciertos diseños artísticos son extremadamente fantasiosos, alejándose de una estética anime pero algo más realista como pudimos ver en Three Houses. Además, los diferentes movimientos de combate no ayudan en absoluto si queremos encontrar un juego de estética anime más "maduro o serio".

Los diseños de esta nueva entrega poseen sus claro-oscuros, encontrándonos un buen puñado de personajes cargados de detalles en sus modelados mientras que otros están menos inspirados (por supuesto no contamos a Emblemas como Marth, Ike, Sigurd o Lucina...todos personajes de anteriores entregas.

Las cinemáticas siguen siendo espectaculares, luciendo de escándalo tanto en el modo portátil de la consola como conectada al televisor desde el dock de Nintendo Switch. Del mismo modo, las secuencias de animación de los diferentes golpes o ataques especiales que podemos asestar durante los combates estratégicos por turnos lucen de escándalo pese a ser mucho más exagerados al haber tomado unos derroteros más propios del anime actual.

Los escenarios cuentan con un papel vital dentro de la jugabilidad del título, poseyendo unos buenos diseños ene l campo de batalla, cargados de elementos que además de artísticos, nos proporcionarán ciertas ventajas durante nuestra estrategia de combate.

 

JUGABILIDAD

Pese a que Fire Emblem Engage bebe prácticamente  en su totalidad del estilo de juego de todas las pasadas entregas, no deja pasar la oportunidad para introducir nuevas mecánicas que den un toque más fresco y estratégico a un título que ya de por sí es desafiante y que nos hará movernos por el escenario con cabeza.

Como es de esperar, estamos ante un RPG táctico por turnos en donde deberemos mover nuestros personajes por un escenario dividido en cuadrículas, pudiendo en función de la clase del personaje abarcar un mayor rango de desplazamiento o atacar a distancia e ir derrotando a las diferentes hordas de enemigos que nos encontraremos una vez entramos en la fase de combate. Como siempre, dispondremos de un turno completo para el jugador para disponer nuestras unidades a placer por el mapa de forma estratégica o establecer una postura más ofensiva y atacar sin miramiento a todo enemigo que se encuentre en nuestro rango de ataque. Una vez hemos completado todas nuestras acciones posibles le tocará al rival mover ficha (donde queremos destacar la buena inteligencia artificial que posee el título).

Además de las diferentes clases de personajes, los cuales dispondrán como dijimos de ciertas habilidades y peculiaridades en el terreno de batalla, se mantienen las fortalezas y debilidades en función de las armas que se crucen en combate, siendo así que la espada tienen ventaja sobre las hachas, las hachas vencen a las lanzas y estas se imponen frente a las espadas. Estas ventajas y desventajas tendrán una importancia crucial a la hora de los combates pues, gracias a ellas, podremos realizar una ruptura sobre nuestro enemigo que nos permita realizar dos ataques consecutivos o un contraataque tras recibir daño rival (algo que nos hará ganar una ventaja considerable de cara al devenir de la batalla).

Pero sin duda, el mayor cambio que introduce Fire Emblem Engage (como bien se intuye por el título del nombre en inglés)  reside sin duda en el poder oculto que poseen los portadores de los diferentes Emblemas que podremos ir consiguiendo durante nuestra aventura. Cuando pasan hasta tres turnos, podremos invocar a nuestro Emblema para que luche a nuestro lado, pudiendo incluso seleccionar la arma que porten para realizar un ataque especial. Además, pasado un tiempo, tendremos la capacidad de realizar una Fusión con nuestro emblema para convertirnos en un guerrero más poderoso de lo habitual con habilidades y ataques exclusivos realmente devastadores. Dicha fusión terminará desapareciendo a los pocos turnos, obligándonos a saber en qué momento utilizar esta habilidad en función de cómo se incline la balanza a nuestro favor en la batalla.

Por suerte en algunos puntos del escenario existen "halos de luz" donde, si nos situamos sobre ellos, podremos recargar el medidor de Fusión de nuestro Emblema para poder realizar dicha habilidad una segunda vez.

El escenario es parte fundamental de la estrategia de combate que debemos seguir (pudiendo encontrar escenarios estrechos que limitan mucho nuestra movilidad o diferentes obstáculos que impiden desplazar a nuestro equipo con una mayor soltura a través del campo de batalla. Además, algunos elementos del escenario pueden proporcionarnos ciertas ventajas en el combate (como los matorrales), otorgándonos un mayor índice de esquiva ante el ataque rival si nos encontramos situados sobre ellos.

También podremos realizar ataques combinados si colocamos a dos personajes junto al rival al que uno de los dos va a atacar. De esta forma (además de otras que podremos hacer como entregar regalos en la zona de descanso que detallaremos a continuación) podremos mejorar el nivel de afinidad con dicho compañero.

Entre misión principal y misiones secundarias (llamadas desvíos) disponemos de una zona de descanso llamada el Somniel (zona restringida sólo a los Dragones Divinos y donde nuestro protagonista estuvo dormitando durante 100 años). En dicha zona además de mantener un sinfín de conversaciones con los diferentes miembros de nuestro equipo encontraremos algunos minijuegos o la posibilidad de comprar objetos, armas o mejorar las mismas con los diferentes materiales que podremos obtener como recompensa en misiones. Aquí también existen tres modos de juego que podremos desbloquear a medida que transcurren las horas de juego. Estos modos de juego suponen un mayor desafío para el jugador (como el modo Tormenta donde tendremos que completar diferentes campos de batalla de manera consecutiva). Además existe la opción de utilizar las funciones de Nintendo Switch Online en el modo llamado Reto por Relevos, en el cual llegado a un punto del combate, cederemos el testigo a otros jugadores conectados a los servidores de Nintendo para que completen el mismo.

Como mayor pega, cabe mencionar que no existe un modo de juego para enfrentarnos con otros jugadores...algo que quién sabe, lo mismo podremos ver en algunas de las futuras expansiones (aunque el título ciertamente no esté orientado al competitivo).

Por último, además de la duración en torno a las 70-80 horas del título, cabe destacar los diferentes modos de dificultad que posee el juego. Al empezar la partida podremos elegir entre el Modo Normal en el que los caídos en combate tiene una muerte permanente (desapareciendo así de nuestras filas) o un modo casual para los recién llegados a la franquicia en donde no perderemos a un compañero de batalla si resulta derrotado.

Además, existen funciones automatizadas dentro de las secciones de batalla para que la IA luche por nosotros pudiendo elegir una táctica de combate ofensiva o defensiva...algo que sin duda no gustará a los más puristas y que ayudará a los novatos dentro del género a poder continuar sin abrumarse (el título como tal no es complejo ni posee un sistema de estadísticas realmente dificil, pero si el conocer bien las debilidades del triángulo de armas, las diferentes clases y habilidades de cada personaje y el cómo disponer nuestras fichas dentro del tablero sí puede resultar complejo hasta que nos hacemos con el sistema y la interfaz del juego.

Como buen juego de la saga, Fire Emblem Engage cuenta con un apartado sonoro sobresaliente, pudiendo destacar una banda sonora amplísima con auténticos temazos que se adapta a la situación del combate de forma dinámica, cumpliendo un papel fundamental para transmitir la epicidad de un combate al jugador.

Como no podía ser de otro modo, además de cinemáticas tendremos un sinfín de secuencias conversacionales, todas ellas dobladas de manera magistral tanto en japonés (idioma de nuestra elección a falta de un doblaje castellano) e inglés.

 

CONCLUSION

El rey nipón de los RPG tácticos vuelve una vez más para reafirmarse como justo merecedor de este título con un Fire Emblem que mejora en el apartado técnico a todo lo visto hasta la fecha dentro de la franquicia, incluyéndose así a Three Houses. Intelligent System ha decidido cambiar el apartado artístico para la ocasión, creando unos personajes más coloridos y variopintos por sus fantasiosas vestimentas y diseños, más cercanos a un anime actual que a un corte anime más clásico y realista dentro de lo que se le puede pedir al estilo manganime.

Las cinemáticas siguen estando a un altísimo nivel de calidad y las diferentes animaciones conversacionales o los movimientos de combate poseen una gran fluidez y expresividad, demostrando además de con las secuencias de video, que la desarrolladora no ha escatimado en esfuerzos en el apartado visual.

La mayor pega que encontramos a un imprescindible para los amantes del género es una trama sencilla en donde apena se profundiza en los diferentes personajes secundarios y compañeros que se unen a nuestro plantel de guerreros...aunque dicha carencia se suple con creces co una excelente jugabilidad, la cual pese a añadir ciertas mejoras que otorgan una mayor fluidez y dinamismo a los combates, se mantiene inalterable con respecto a anteriores títulos de la franquicia.

Fire Emblem Engage es todo un homenaje a una longeva saga de juegos exclusivos para las consolas de Nintendo en donde, muy hábilmente, juegan con el corazoncito de los fans más acérrimos al rescatar a doce héroes de títulos pasados que vuelven una vez más a aparecer en un título perteneciente a la franquicia de manera magistral, estando fielmente representados a como ya pudimos ver en cada uno de sus títulos (tanto en carácter, diseño, etc). Es por eso que Engage se convierte en un imprescindible para aquellos que con mayor o menor dificultad, han podido disfrutar de todos los juegos de la franquicia. Además, el rescatar estos personajes del pasado puede incentivar a otros jugadores que no conozcan en profundidad a la franquicia a conocer títulos pasados de la saga...cosa que no será fácil puesto que por desgracia, Fire Emblem no ha contado con un gran numero de seguidores en el pasado....hasta ahora.

 

NOTA: 8.5