[Análisis] Fire Emblem Warriors: Three Hopes

Título: Fire Emblem Warriors: Three Hopes                    Plataforma: Nintendo Switch

Género: Estrategia, acción, Musou                                Distribuidora: Nintendo

Tecmo Koei y Omega Force los amos y señores del género musou, han ido ganandose la confianza de numerosas licencias de terceros para lanzar nuevas entregas de corte musou de importantes series de animación japonesa o, como es el caso, de títulos exclusivos de Nintendo. Desde la aclamada One Piece y Ataque a los Titanes, pasando por una de las franquicias más longevas, queridas y cuidadas de Nintendo: The Legend of Zelda (Con Hyrule Warriors y con la no tan lejana Era del Cataclismo).

Con una gran acogida de las versiones del anterior Fire Emblem Warriors y los dos títulos de corte musou de Zelda, Nintendo cede una vez más la aclamada licencia estratégica exclusiva de sus consolas para lanzar una versión alternativa de unos de los juegos de corte RPG más importantes de Nintendo Switch: Fire Emblem Three Houses.

Cargado de acción a raudales, Fire Emblem Warriors: Three Hopes consigue adaptar a la perfección el corte estratégico de la saga Fire Emblem con el frenetismo y los mamporros típicos del genero musou. Es por eso y por mucho más, que no nos tiembla la mano al afirmar que Omega Force ha sabido exprimir al máximo su creatividad e ingenio para brindarnos el que sin duda es el mejor juego del género de la década.


 

HISTORIA

Fire Emblem Warriors: Three Hopes cuenta una versión alternativa de la trama ocurrida en el título que da origen: Fire Emblem Three Houses. Para ello, contamos con un avatar principal (el cual podremos elegir su sexo) sobre el que recaerá el peso de la historia. Shez (que es así como se llamará nuestro personaje principal) es un mercenario que, en la búsqueda de un grupo de mercenarios al que formar parte, se topa inesperadamente con los líderes de las tres grandes casas que conforman el reino de Faerghus. Será en ese momento en donde se verá envuelto en una guerra plagada de traiciones, enemistades y demás sorpresas que variaran en gran medida en función de las decisiones que tomemos a lo largo de nuestra aventura.

Es por ello que la trama puede jugarse desde el punto de vista de las tres casas, en función de la escuela de maestría que elijamos al inicio del prólogo del juego.

La historia como tal, no es excesivamente compleja, pero si no se es conocedor del título original, el lore que hay detrás de Three Hopes y la ingente cantidad de información que se nos proporciona durante las numerosas secuencias de diálogo, puede abrumarnos.

Durante dichas secuencias habrá momentos donde tendremos que elegir una respuesta entre varias opciones, pudiendo condicionar ligeramente la historia además de ayudarnos a obtener un vínculo de amistad entre los diferentes personajes jugables que formarán parte de nuestro ejercito.

Al disponer de tres historias diferentes en función de la casa elegida al inicio, cada trama nos narra la guerra que se avecina desde un punto de vista diferente. Además, los personajes que nos ayudarán en nuestro viaje también serán diferentes en función de la escuela de maestría que elijamos.

 

GRAFICOS

Con varios títulos para la híbrida de Nintendo a sus espaldas,  Omega Force parece que por fín ha sido capaz de desentrañar todo el potencial de la consola para lanzar un juego cargado de polígonos en movimiento con las decenas de masillas que aparecerán en pantalla sin que apenas apreciemos un resentimiento del rendimiento de los FPS (algo duramente criticado por la comunidad y fans de The Legend of Zelda que no fueron capaces de solventar en La Era del Cataclismo).

Por supuesto, para conseguir un rendimiento sobresaliente (siendo realistas ante el hardware que estamos delante) Omega Force ha tenido que recortar ciertos elementos del apartado gráfico que mencionaremos en las siguientes líneas.

Antes de ahondar en los defectos, debemos alabar el excelente apartado visual y diseño de los personajes protagonistas de la historia. Omega Force ha conseguido plasmar, al igual que hiciese anteriormente con Zelda, el estilo artístico de Three Houses, destacando de manera sobresaliente el altísimo nivel de detalle de los modelados de todos y cada uno de los personajes relevantes de la trama, los cuales parecen sacados directamente del juego original.

A estos detallados modelados debemos sumarle una buena ejecución de sus animaciones y movimientos. Además, algo digno de agradecer es que, además de las cinemáticas en los momentos claves de la historia, hay un sinfín de diálogos que están perfectamente animados con modelados 3D. A diferencia de otros títulos del mismo corte, estas secuencias de diálogo se notan trabajadas, alejándose de las típicas secuencias estáticas otorgando viveza y expresión a las caras y los cuerpos de los personajes.

Como dijimos, el rendimiento del título es más que correcto, apreciando alguna ralentización puntual en los momentos con mayor carga poligonal y mayores efectos de luz de nuestros ataques y hechizos. Para conseguir un rendimiento adecuado, el título se ve forzosamente a recibir una serie de recortes que, si bien algunos pasan desapercibidos por la acción desenfrenada del título, otros resultan demasiados evidentes. Los escenarios, considerablemente grandes en su mayoría, cuentan con un modelado muy discreto, con texturas de no muy buena calidad y con pocos elementos con los que poder interactuar. Se sienten algo planos y carentes de vida pero, como insistimos, son tantas las misiones que debemos completar en cada batalla y es tal el grado de estrategia y complejidad que encontramos en el juego que este pequeño defecto pasa fácilmente desapercibido a ojos del jugador. El efecto de popping sigue presente una vez más sin ser especialmente sangrante ni evidente...o al menos no que moleste durante el gameplay.

Por el contrario, una resolución considerablemente pobre (tanto en modo portátil como en sobremesa) y la ausencia de filtros de delineado que suavice los dientes de sierra, dejan en evidencia que Switch, pese a tener un potencial enorme si se sabe exprimir la máquina a conciencia, empieza a resentirse sin una sucesora que le otorgue algo de potencia a las thirds party.

 

JUGABILIDAD

Además de la acción desenfrenada y los mamporros a diestro y siniestro machacando diferentes combinaciones de botones de ataques fuertes y débiles para ejecutar impresionantes combos, Fire Emblem Warriors: Three Hopes ha sabido trasladar a la perfección el componente estratégico de la saga Fire Emblem con un sinfín de añadidos y posibilidades antes y durante la partida que nunca antes habíamos visto con tal profundidad y complejidad en un juego del género musou.

Antes de entrar plenamente de lleno en el gameplay, debemos resaltar las casi infinitas posibilidades que disponemos en los campamentos base. Como os podéis imaginar, es en los campamentos donde podremos confeccionar, mejorar y equipar las diferentes clases de cada personaje, armas etc. Para ello dispondremos de un buen puñado de localizaciones específicas a las que acudir y que podremos ampliar y mejorar para obtener nuevas mejoras a la hora de entrenar a nuestros personajes, mejorar nuestro armamento, comprar nuevos recursos, etc.

Con respecto a las clases, cabe destacar que existen un buen puñado de ellas que podremos aprender ganando experiencia combate tras combate tanto a nuestro personaje principal como al resto de guerreros que nos acompañan a la batalla. Cada clase posee una subrama de nuevas especialidades que iremos dominando poco a poco para obtener unos ataques  y habilidades específicos que efectúen un mayor daño de campo, un daño de efecto mágico, etc. Además, cada clase requiere de un arma determinada, la cual en el campo de batalla, nos otorgará una debilidad o una fortaleza ante según qué tipo de enemigos. (una vez dominada una clase, podremos cambiar a otra diferente para personalizar a cada personaje a nuestro gusto).

En el campamento, también será donde se desarrolle la mayor parte de la trama, siendo el lugar en donde podemos interactuar con todos y cada uno de los personajes. Una vez que hablamos con ellos, podremos conseguir una puntuación de afinidad que, a medida que va ascendiendo con nuestro personaje, nos otorgará mejoras durante el combate. Lo cual, además de ayudarnos a conocer más profundamente la personalidad y la historia de cada personaje protagonista del título original, nos da el aliciente de ayuda en combate (más fuerza en nuestros ataques cuando el personaje con el que tenemos un vínculo de nivel alto está en el campo de batalla, etc).

Además de la zona de entrenamiento para elegir la clase y levear a nuestros personajes y potenciar sus diferentes atributos de fuerza, defensa, velocidad, etc, existen otras localizaciones de gran relevancia como la armería. Aquí no solo podremos comprar nuevo armamento que va mejorando a medida que ampliamos nuestro campamento y avanzamos en la historia, sino que también gastando recursos y dinero podremos mejorar el nivel de nuestra arma preferida.

El componente de las clases, subir cada personaje, elegir qué dos ataques especiales dispondrá nuestro personaje durante la batalla, etc. puede resultar a simple vista algo sencillo de realizar....el problema viene cuando disponemos de un equipo de compañeros de batalla enorme y debemos realizar una estrategia previa con cada uno de ellos para elegir bien a nuestros acompañantes al campo de batalla que tengan una fortaleza frente a los rivales que nos enfrentaremos en la lucha.

Una vez que acabamos los preparativos, podremos ir al mapa desde donde elegiremos las diferentes secciones disponibles donde poder combatir y completar misiones. una vez ahí, y previo al combate, dispondremos de un tiempo para vislumbrar el mapa y los enemigos a los que nos enfrentaremos en dicha misión. Aquí podremos elegir los diferentes compañeros que podrán acompañarnos a la batalla, pudiendo ver las fortalezas y debilidades de cada uno de ellos frente a los enemigos.

Una vez entrados en la misión, podremos elegir el personaje que queramos manejar con la cruceta direccional de los joycon para tomar control sobre un personaje específico para repartir tollinas a diestro y sinestro. en determinados momentos, habrá diferentes puntos del mapeado donde se requerirá de nuestra ayuda (ya sea para defender una base, ayudar a un aliado en apuros etc). Como físicamente es imposible desplazarse de un punto a otro sin perder el objetivo principal de la misión, podremos abrir un mapa en 2D del escenario pausando el juego para poder así dar órdenes a nuestros aliados en el campo de batalla. De esta forma podremos mandar atacar a enemigos específicos, defender una zona o a un aliado o incluso, ordenar atacar a todos los personajes aliados que están dispersos por el mapeado a un sólo objetivo (del mismo modo, podemos ordenar a todos defender una zona o personaje en cuestión.

Durante cada fase irán apareciendo una serie de misiones secundarias que, de completarlas, nos proporcionarán una bonificación de suministros, armas etc una vez acabada la misión principal. La mecánica de dar ordenes a nuestro pelotón de aliados es crucial e importantísima tanto para poder completar dichas misiones secundarias como las principales. Si a este componente estratégico le sumamos lo mencionado anteriormente de las fortalezas y debilidades frente a cada tipo de enemigo en función a las clase y el arma que equipemos a nuestro equipo, podéis observar que Fire Emblem Warriors: Three Hopes no es el típico musou machacabotones.

Otro elemento característico de la saga Fire Emblem reside en la pérdida definitiva de una de las unidades de combate si es derrotada en una misión. En Warriors, a partir del capítulo 4 y si elegimos dicha opción, podremos perder para siempre a uno de nuestros aliados si cae durante la batalla.

Por último, cabe destacar que el juego es completamente disfrutable en modo cooperativo en modo local, dividiendo la pantalla en 2. Al igual que ya pasaba en anteriores musous lanzados en Nintendo Switch, el modo cooperativo se resiente ligeramente de manera más significativa en su rendimiento pero a diferencia de otros títulos, este modo es más disfrutable en esta ocasión.

 

SONIDO

Si hay algo que destaca de manera sobresaliente sin lugar a dudas es el apartado sonoro de Fire Emblem Warriors: Threee Hopes. Para la ocasión, este título rescata reversiones de piezas del juego original, realizando mezclas más movidas que se adaptan al frenetismo de la acción del título pero siendo fácilmente reconocibles por los fans del título en el que se basa.

El juego posee una incontable cantidad de diálogos narrados en inglés y japonés, con un alto nivel de interpretación. En lo personal, siempre apuesto por la versión original del doblaje pero cabe destacar que los actores de doblaje en inglés hacen un papel magnífico. Además, como detalle, se han recoperado a los actores originales del título base para la ocasión. Un apartado hecho con mimo sin lugar a dudas.

 

CONCLUSION

Omega Force, lejos de lanzar al mercado un juego de corte musou más basado en una franquicia, ha puesto toda la imaginación y la carne en el asador para exportar de la manera más fidedigna posible dentro de género un juego de corte estratégico que, pese a que pueda no parecerlo, se refleja de manera sobresaliente como nunca antes hemos visto en otro juego de corte musou. Sin duda, el planteamiento jugable de Fire Emblem Warriors: Three Hopes previsiblemente supondrá un antes y después en los futuros títulos de la desarrolladora.

Three Hopes cuenta con 3 historias diferentes contadas desde diferentes puntos de vista, siendo necesario completar las 3 para ver el auténtico final del juego. Cada camino de la trama tiene una duración considerable, haciendo así que completar el juego nos requiera de más 100 horas quedándonos incluso cortos.

Aunque la jugabilidad durante el combate es simple y básica de los juegos del género musou, todo el entramado estratégico que hay antes de las misiones y durante las mismas otorga un componente estratégico nunca visto anteriormente y que es digno de agradecer, ya que además de representar a la perfección la saga original en la que se basa este nuevo título, añade una profundidad y una dificultad a un género que anteriormente apenas suponía un reto para el jugador.

A nivel técnico no estamos ante un título puntero (ningún musou de hecho aspira a ello) aunque es digno de mención el excelente modelado y nivel de detalle de los personajes principales de la trama al igual que, ya que es un título exclusivo para la híbrida de Nintendo, Omega Force haya sabido sacar un mayor rendimiento a la consola para traernos un musor multitudinario, frenético y divertido con un rendimiento constante que rara vez y salvo alguna pequeñísima excepción, repercute de manera negativa en la jugabilidad.

Si eres de aquellos jugadores que no le gustan los juegos del género, os recomendamos encarecidamente que le deis una oportunidad a Fire Emblem Warriors: Three Hopes...las novedades jugables y las nuevas mecánicas consiguen dar la frescura que necesitaban como agua de mayo los títulos del género.

 

NOTA: 8.5